1) Servicios y Estructura
del Estudio M. Wainstein

Nuestra actuación profesional data desde 1980 asesorando y auditando en materia administrativa, contable, societaria, laboral, previsional e impositiva y aportando nuestro conocimiento para resolver problemas vinculados con la estructura empresarial.

En los últimos años, a la luz de los cambios operados en las estructuras empresarias hemos desarrollado el servicio de organización y asesoramiento para la gestión empresaria, aportando nuestro conocimiento y experiencia en aspectos tales como circuitos administrativos, organización funcional, gestión presupuestaria y financiera, análisis de indicadores económicos, etc.

El Estudio trata de brindar a sus clientes un servicio acorde con los enunciados del punto 3).

A tal fin cuenta con profesionales con formación teórica en la especialidad y con amplia ejercitación práctica en los aspectos de procedimiento y ejecución de tareas que les son propias.

Coherentes con la idea de aplicar herramientas modernas a la gestión empresaria el Estudio cuenta con los medios informáticos y comunicacionales necesarios para brindar los mejores servicios: servidor de red con terminales en cada puesto de trabajo, base de datos on line con acceso a la normativa vigente, fax, modem, e mail, central telefónica, son algunas de las herramientas disponibles que posibilitan potenciar la capacidad profesional al servicio del cliente. Hemos desarrollado de nuestra página web, habiendo obtenido, previamente, nuestro dominio propio en Internet.

Una de las premisas básicas del servicio es la de asesorar con el máximo conocimiento del tema; no nos referimos solamente al conocimiento teórico-técnico, nos referimos a que para asesorar o dictaminar correctamente debemos conocer la empresa, sus directivos, empleados, el mercado en que se desenvuelve y otros aspectos que en un asesoramiento "de laboratorio"generalmente no cuentan. Para ello mantenemos una constante presencia y contacto con las empresas y sus impulsores (dueños, directivos, empleados); ningún problema a resolver tendrá una sola solución posible; es allí donde tratamos de ejercer nuestro servicio: encontrar la solución o aconsejar el camino más adecuado a la realidad aunque no coincida con el óptimo ideal teórico.

2) La empresa en el contexto económico actual

La globalización de la economía es un proceso histórico que se profundiza en los últimos años del siglo XX. Se acelera en la última década con el desarrollo de un nuevo paradigma económico basado en el conocimiento, la información y la alta movilidad de los factores, especialmente del capital.

Las corporaciones internacionales y los flujos financieros mundiales son los protagonistas principales de este proceso, planteando grandes desafíos a los estados nacionales, a las PyMES y a los individuos.

Al mismo tiempo queda claramente marcada la brecha existente entre las naciones desarrolladas y el resto, lo que determina que dos tercios de la población mundial se debatan en la pobreza y carezcan de adecuados niveles de acceso a la salud, educación y vivienda.

En nuestro país este proceso se manifiesta claramente a través de la concentración económica producida en el ámbito de los negocios, por el proceso de privatización de empresas de servicios públicos y posteriormente la transnacionalización de la banca y de gran cantidad de empresas nacionales creadas y desarrolladas en las décadas anteriores, al amparo de políticas totalmente distintas a las actuales.

Qué rol les cupo a las PyMES en este período ? Luego del auge y desarrollo de este tipo de empresas en las épocas de fronteras cerradas y de creación de una incipiente industria nacional, la apertura económica produjo enormes impactos en las PyMES. Muchas de ellas no estaban preparadas para el cambio, no supieron o no pudieron reconvertirse y desaparecieron. La falta de tiempo y recursos unidas a la dificultad de acceso a las fuentes de financiamiento y del saber hicieron aún más difícil el tránsito de estas empresas de una economía cerrada y distributiva a otra abierta y ferozmente competitiva.

3) El rol del profesional en Ciencias Económicas en la empresa

Dentro del contexto descripto,- caracterizado por la globalización y la transnacionalización, la búsqueda de menores costos de producción, el proceso de cambio tecnológico y de expulsión de mano de obra con la secuela de desocupación y precarización laboral, el incremento de las comunicaciones y la concentración económica -, la actividad de la empresa debe estar orientada hacia el cambio.

Por qué cambiar ? Hay que cambiar cuando uno se dá cuenta que las formas de manejar la organización no funcionan; hay que cambiar para pasar de una situación de ineficacia a otra de eficacia. Cambiar no es fácil; lo primero con lo que debemos contar para ello es un adecuado diagnóstico de la situación de la empresa para aplicar luego las terapias que correspondan.

Es una misión clara e ineludible de los profesionales en Ciencias Económicas conocer y acompañar los nuevos paradigmas económicos y, sobre todo, ser facilitadores de los procesos de cambio consiguientes.

"Quién no teme al cambio es quién se enfrenta al mismo de la mejor manera; pero la forma más segura de no temerle es liderándolo".

Es en este aspecto donde la función del Profesional adquiere vital importancia: debe influir sobre el empresario para que éste adopte, en su propio beneficio, herramientas y procedimientos organizacionales que están a su alcance y que le pueden otorgar a la gestión empresaria mejores niveles de racionalidad y eficiencia. Muchas veces, por desconocimiento o mala información, el empresario descree de la organización que se le recomienda; cree que el avance tecnológico no lo alcanza (y por el contrario: que cada vez está más lejos de él); que las normas vigentes son de imposible cumplimiento (a veces cierto) y que por lo tanto nada debe hacer en ese sentido (nunca cierto).

El profesional tiene la responsabilidad de inducir al empresario hacia una gestión más racional y eficiente; conceptos que el empresario considera que no le son propios seguramente le serán de utilidad: marketing, informática, gestión financiera, presupuestos y otras herramientas de la administración de los negocios deben aplicarse (con las adaptaciones que correspondan) sin tratar de justificar su no aplicación con los argumentos conocidos (y no siempre reales): costo, dimensión empresaria, dependencia de terceros, etc. La contabilidad debe ser una herramienta más para la toma de decisiones y no el formalismo legal; los impuestos deben ser tenidos en cuenta en la formulación de costos y en los presupuestos financieros.

El empresario debe exigir de su profesional justamente eso: UN SERVICIO PROFESIONAL.

No malgastar su tiempo y su dinero en contratar un profesional para exigirle tareas que no le son propias y que podrían ser ejecutadas por personal idóneo y generalmente a costos más reducidos. Pero así como el empresario debe exigir eso, el Profesional deberá, también, hacer el esfuerzo que implica brindar un servicio más elaborado y por lo tanto más comprometido y profundo; sólo así estará cumpliendo su función.